Luego de que se diera a conocer en medios de comunicación la manera en la que operan un grupo de policías de investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, los cuales presuntamente se dedicaban a fabricar delitos a empresarios y comerciantes con la finalidad de extorsionarlos y despojarlos de fuertes sumas de dinero, las autoridades informaron que ya se obtuvo una orden de aprehensión en contra de cuatro elementos de la Policía de Investigación de dicha institución y de un civil.
La dependencia estatal informó que, una vez que fueron identificados Carlos “N”, Miguel Ángel “N”, José Carlos “N” y Anel Belem “N”, como miembros de la Policía de Investigación, fueron separados de sus funciones y tras haber obtenido la orden de aprehensión por parte de la autoridad judicial, realiza acciones para ubicarlos y detenerlos en cumplimiento del mandato judicial.
Tras los hechos que se registraron en el municipio de Chalco, el pasado 3 de mayo, también se identificó a Leonardo Darinel “N”, como presunto responsable, en conjunto con los ahora exfuncionarios, en el secuestro exprés de un empresario que, de acuerdo con la investigación, viajaba a bordo de una camioneta tipo Pick Up sobre una vialidad del municipio de Chalco.
A través de una tarjeta informativa, la dependencia señala que de acuerdo con las investigaciones, los cuatro presuntos implicados, circulaban a bordo de un vehículo marca Chevrolet, tipo Malibú, color blanco; descendieron de la unidad y se identificaron como elementos de la FGJEM.
Después lo llevaron al Centro de Justicia de Chalco, donde lo torturaron. El señor Eduardo aceptó entregar dos millones de pesos para que lo dejaran libre, los cuales entregó a la comandante Ana Belém Flores Segoviano y a su jefe Carlos Reyes.
“Estos individuos, presuntamente le dijeron al conductor que “tenía una investigación en su contra, por hechos delictivos”, por lo que lo trasladaron al exterior del Centro de Justicia de Chalco, donde lo mantuvieron dentro del vehículo tipo Malibú, posteriormente los probables implicados le solicitaron una fuerte suma económica a cambio de liberarlo y no presentarlo ante el Ministerio Público”, informó.
La dependencia estatal agregó que hasta en el lugar se presentaron tres personas más, entre ellas Anel Belem “N”, quienes insistieron a la víctima que hiciera entrega del dinero. Una vez que les fue entregado, la víctima fue liberada.
Cabe destacar que la Institución continúa con la investigación para solicitar orden de aprehensión en contra de dos investigados más por su probable intervención en estos hechos, uno de ellos también fungía como elemento de la Policía de Investigación y de igual forma fue separado de sus funciones.
De acuerdo con información del medio Milenio, quien entrevisto a Eduardo, uno de los empresarios secuestrados por estos sujetos, menciona que fue secuestrado y torturado por los elementos policiales, quienes además le exigieron 2 millones de pesos, los cuales entregó.
“Se bajaron cuatro personas y me abordaron hacia mi camioneta y me dijeron que era una revisión de rutina. Me empezaron a decir que me iban a culpar de delitos de extorsión, de secuestro, de acopio de armas de fuego y que tiraba vicio en la zona. Me empezaron a torturar arriba del coche. Me pusieron una bolsa de plástico en la cabeza. Ya casi a punto de perder el conocimiento fue cuando yo les pedía de favor que ya no me hicieran eso, que de alguna manera me estaban confundiendo (…) una de las personas que me estaban torturando piden que le acerquen el Tehuacán para que me lo pusieran en las narices. Yo esposado, la verdad, ya temeroso por mi vida, por mi integridad física, les decía que ya me dejaran”.
Eduardo y su abogada presentaron una denuncia, sin embargo aseguran que las autoridades estatales están encubriendo el caso, ya que luego de la denuncia, los señalados fueron informados de que se les estaba acusando y algunos lograron huir.
“Yo no he visto avances en la investigación, estas personas hasta donde yo sé ya no están laborando, ya se dieron a la fuga (…) percibo que hay mucho encubrimiento hacia sus agentes que cometieron este delito”, dijo la represéntate legal de Eduardo en entrevista para Milenio.
Así mismo mencionan que un grupo de agentes de la policía de investigación los han estado acosando e incluso les han pedido que desistieran de la denuncia. Por otra parte un grupo de restauranteros de la zona en la que se encuentran los negocios de Eduardo se sumaron a las denuncias mencionando que ellos también habían sido victimas de un delito similar por parte de esos “servidores públicos”.
