La autopista México-Querétaro y sus vías alternas continúan sumergidas en un intenso caos vial que afecta a miles de conductores, generando largas filas y retrasos significativos en uno de los corredores más importantes del país.
Caminos y Puentes Federales (Capufe) reportó dos puntos críticos de congestionamiento. En el kilómetro 33, con dirección a la Ciudad de México, un accidente provocó una fila de aproximadamente 7 kilómetros en la zona de la caseta de Tepotzotlán. En el kilómetro 42, con dirección a Querétaro, la salida hacia Teoloyucan registró 10 kilómetros de filas.
El impacto del colapso se extendió más allá de la autopista. La Avenida José López Portillo, principal arteria de la región, también se vio severamente afectada. El Mexibús, en su Línea 2, reportó esperas de hasta 40 minutos, con unidades completamente saturadas y usuarios optando por caminar para llegar a sus destinos.
Zonas como Ciudad Labor, Las Torres en Tultitlán, y el puente de Perinorte en Cuautitlán Izcalli presentaron puntos de máxima congestión. Avenidas como Gustavo Baz y Prolongación Hidalgo, habitualmente consideradas rutas alternas, también mostraron importantes cargas vehiculares.
El problema se agrava por el exceso de unidades de carga que intentan acceder a parques industriales como San Martín Obispo Park y otros parques industriales de la zona norte del Estado de México.
Las autoridades han pedido a los automovilistas tomar precauciones y considerar tiempos de traslado significativamente mayores. El caos vial evidencia la falta de planes de movilidad de los gobiernos en una de las regiones más transitadas del país.
