El diseñador de moda Camilo Morales ha encontrado una forma innovadora de reciclar: transformar la publicidad política en accesorios de moda. Morales ha estado recolectando vinilos publicitarios de las recientes elecciones locales, estatales y federales de México para convertirlos en bolsos, ropa y accesorios.
Durante el último año, Morales ha estado quitando las omnipresentes pancartas políticas, desmontándolas con tijeras y cosiéndolas en bolsas de mano. Estos bolsos se venden entre 100 y 600 pesos bajo su marca Rere. El bolso más caro es un collage de los ojos muy sombreados de Clara Brugada, la jefa de gobierno electa de la Ciudad de México.
Morales comentó sobre la abundancia de anuncios políticos, diciendo: “Bromeé diciendo que prácticamente crecían en los árboles. Por la noche retiraba un anuncio y al día siguiente ya había otro que ocupaba su lugar”.
Según la ley electoral, los partidos políticos tienen cuatro días después de terminadas las elecciones para retirar sus anuncios. Sin embargo, sólo en la Ciudad de México, se estima que esta temporada se produjeron unas 10 mil toneladas de basura por publicidad política, según Juan Manuel Núñez, profesor de la Universidad Iberoamericana.
A pesar de que las pancartas tienen logotipos que las marcan como reciclables, no estaba claro cuántas se estaban reciclando realmente. Núñez señaló que, aunque se promocionan como respetuosas con el medio ambiente, estas pancartas y lonas suelen estar hechas de PVC, que puede tardar cientos de años en descomponerse.
Otros esfuerzos para encontrar nuevos usos para los anuncios incluyeron a un usuario de TikTok que se volvió viral por convertirlos en camas para perros y a inmigrantes que los convirtieron en tiendas de campaña. Sin embargo, es el trabajo de Morales el que destaca, transformando la basura política en tesoros de moda.
