Por un periodo de nueve años, José Luis Cervantes Martínez será el nuevo titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, quien conoce la materia y muestra de ello ha sido su trabajo, entre otros cargos como subprocurador Regional y fiscal Regional de Justicia de Tlalnepantla, así como subprocurador General de Justicia del Estado de México.
Donde al parecer el compadrazgo ha podido más, es el caso de Adriana González Furlong, la cual ha sido suspendida en dos ocasiones, pero las influencias y buenas relaciones le permiten estar dentro de la nómina presupuestal, en Naucalpan.
González Furlong forma parte de los funcionarios del Instituto de la Mujer, solo que en su historial tiene dos RSPS (Reporte de Servidor Público Sancionado) uno en el año de 2013 por negligencia y el otro en el 2015 por violación a leyes y normatividad presupuestal, al saber de su situación fue llamada a declarar ante el Contralor municipal Eduardo Contreras, solo que Adriana no acudió sola sino la acompañó su abogado, habrá algo atrás o cual será el temor.
Mientras todos se preguntan por qué sigue trabajando en el gobierno cuando fue inhabilitada y lo peor del caso es que sabiendo esta anomalía los síndicos y regidores levantaron la mano como borregos para dar su aprobación para el puesto incurriendo en violación por lo que pueden ser amonestados.
Personal a cargo de María Argueta, tal parece que trabajan por consigna o hay plan con maña, en días pasados dos inspectores Erick y Pablo “N” se presentaron en varios restaurantes de la Avenida Ávila Camacho, en el fraccionamiento La Florida para solicitar las licencias de los establecimientos, cuando saben que no hay papelería en el Ayuntamiento para entregar dichos documentos.
Recordemos que otros dos inspectores de María Argueta fueron detenidos y llevados a Barrientos; cabe mencionar que dicha funcionaria maneja a sus anchas personal de Desarrollo Urbano, Vía Pública. Mercado, Verificaciones y Clausuras, así como Normatividad Comercial.
Situación que está causando revuelvo y cuestionamientos por parte de los regidores, del por qué maneja tantas oficinas, situación que viene desde la pasada administración de Patricia Durán Reveles quien le dio manga ancha y sigue, el influyentismo sigue pese a que tiene muchas cosas en su contra como las irregularidades de la obra de Punta Norte.
Así como la saturación de puestos autorizado por Alfredo Vinalay, ex titular de Desarrollo Económico y con el pretexto de que ahora sí va en serio el ordenamiento en Vía Pública y dizque metiendo en cintura a los ambulantes que trabajan con permisos falsos que se entregaron como pan caliente. El ordenamiento comercial fue solo muleta.
Muestra de ello, es la demanda de los vecinos de la Ahuizotla quienes piden la atención de la alcaldesa Angélica Moya Marín para que limpien de ambulantes la avenida de La Naranja y el centro de la colonia en cuestión, ya que el líder de nombre Aristeo cobra mil pesos por metro y tiene más de trecientos agremiados y los que cada semana se acumulan. POR HOY HASTA AQUÍ…