La economía de México desaceleró su ritmo de crecimiento en el cuarto trimestre, aunque avanzó ligeramente por encima de lo que se había estimado preliminarmente, con lo que se expandió un 3.1% en todo 2022.
El Producto Interno Bruto (PIB) creció un 0.5% frente al periodo julio-septiembre, cuando registró un avance del 0.9%, de acuerdo con cifras desestacionalizadas divulgadas el viernes por el instituto de estadística, INEGI.
Anteriormente, la institución había pronosticado que la segunda mayor economía de América Latina se habría expandido un 0.4% en el cuarto trimestre.
Esto ocurrió por incrementos trimestrales en las actividades primarias (2%), en el sector secundario (0.5%) y en el terciario (0.1%).
Asimismo, el Inegi aumentó a 3.6% el crecimiento interanual del PIB del cuarto trimestre, comparado con el mismo periodo de 2021, tras una estimación previa de 3.5%, con base en cifras originales.
Este dato fue impulsado en particular por la subida interanual del sector agropecuario (6.3%), acompañado de crecimientos en los servicios (3.5%), y de la industria (3.2%).
El PIB publicado este viernes está dentro de lo esperado por el Gobierno mexicano, cuya Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) había estimado un crecimiento del 3%.
En el sector privado también había un consenso de 3%, según la “Encuesta Citibanamex de Expectativas” de enero, que se levanta entre 33 grupos de análisis de diferentes bancos, casas de bolsas y otros.
Mientras que el Banco de México (Banxico) también había pronosticado un incremento del 3% en su último informe de noviembre pasado.
Para 2023 hay una falta de consenso sobre las proyecciones, ejemplificado por un pronóstico de 1.7% del Fondo Monetario Internacional (FMI), pero un 0.9% esperado por el Banco Mundial.